Conscientes de que adquirir una vivienda en propiedad no es algo que esté al alcance de todos los bolsillos, muy especialmente en las grandes ciudades, los poderes públicos han ido poniendo en marcha diferentes sistemas que buscan favorecer el acceso a la vivienda a personas cuyos recursos económicos no son elevados. Uno de esos sistemas es el de Viviendas de Protección Oficial (VPO). Vamos a ver cinco aspectos importantes en relación con las mismas.
1. ¿Qué son las Viviendas de Protección Oficial?
Son viviendas en las que los promotores y constructores reciben ayudas públicas a fin de que pongan esos inmuebles en venta a un precio más bajo que el de mercado. Dado que el promotor y el constructor reciben dinero por parte de la Administración Pública, pueden vender las casas más baratas y no por ello pierden rentabilidad.
2. ¿Qué tipos de viviendas protegidas existen?
- VPO: son las clásicas, las que entran dentro de la definición que acabamos de ver.
- VPO de Promoción Pública: aquí la diferencia radica en que las viviendas son construidas y ejecutadas por organismos públicos.
- Viviendas de Protección Pública: tienen limitaciones con respecto a su superficie y quedan sujetas a un precio máximo de venta. Algunas se construyen directamente para destinarlas a alquiler a precios más asequibles.
- Viviendas de Integración Social: destinadas a personas que necesitan una especial protección.
3. ¿Qué requisitos hay que cumplir para poder acceder a ellas?
El Plan Estatal de Vivienda suele establecer los requisitos generales, y luego son las comunidades autónomas las que regulan el resto de requisitos para determinar quién puede acceder a una vivienda de estas características.
Lo que se suele exigir habitualmente es:
- No tener una vivienda libre en propiedad.
- Estar empadronado en la comunidad autónoma donde se solicita la VPO.
- No superar el límite máximo de ingresos anuales por unidad familiar.
4. ¿Qué ayudas existen para la adquisición de una VPO?
Además de ser viviendas con un precio más bajo que el de mercado, las viviendas que reciben esta calificación habilitan a sus propietarios para solicitar ayudas públicas de diferente tipo. Por ejemplo, ayudas para el pago de la entrada o la subsidiación de préstamos.

5. ¿Se puede vender una Vivienda de Protección Oficial?
Quienes han accedido a un inmueble de este tipo no pueden lucrarse con su venta, así que mientras dure el período de protección el importe que se puede pedir por la casa vendrá delimitado por la Administración.
En algunos casos, como en la Vivienda de Promoción Pública, se limita incluso la venta, prohibiéndose esta hasta que no hayan transcurrido cinco años desde la adquisición. No obstante, en caso de que exista una causa que justifique la venta, se puede obtener autorización administrativa para vender.
Pasado el tiempo de protección sobre la vivienda, esta se puede vender a precio de mercado.
Desafectación de la VPO
La alternativa para poder vender la vivienda a precio de mercado sin esperar a que pase el tiempo de protección, que suele ser bastante largo, es solicitar a la Administración la desafectación de la misma. Es decir, que deje de considerarse una Vivienda de Protección Oficial.
Para ello hay que hacer unos trámites administrativos que conllevarán la devolución de todas las ayudas recibidas por la compra de la vivienda y el abono del interés legal que corresponde desde la fecha de recepción de la ayuda hasta la fecha de la devolución.
Adquirir una VPO implica un notable ahorro con respecto a comprar una vivienda de precio libre, pero también supone limitaciones a la hora de venderla y hasta de alquilarla. De ahí la necesidad de pensárselo muy bien y sopesar los pros y los contras antes de tomar la decisión final sobre la adquisición.