El proceso de compra de una casa es cada vez más sencillo, pero eso no quiere decir que sea rápido. Porque, una vez que decides que vas a adquirir una vivienda, debes prepararte para poder acceder a un préstamo hipotecario, ya que necesitas tener ahorrado entre un 20% y un 30% del precio de la vivienda que quieres comprar. No obstante, existe una alternativa, una hipoteca al 100 por 100 de financiación.
¿Qué es una hipoteca al 100 por 100 financiación?
Por norma general los bancos solo ofrecen a los clientes a modo de préstamo hipotecario el 80% del valor de tasación de la vivienda. Esto quiere decir que antes de empezar a buscar la casa de tus sueños debes ponerte a ahorrar.
Los expertos recomiendan tener ahorrado entre un 20% y un 30% de dinero que piensas gastar en una casa. Así, tendrás más que suficiente para cubrir ese 20% del precio que no te va a dar el banco y con el 10% restante puedes hacer frente a los gastos típicos asociados la contratación de la compra.
Imaginemos que tu presupuesto para tu casa es de 100.000 euros. Esto quiere decir que antes de acudir al banco a pedir el préstamo debes tener ahorrados, como mínimo, 30.000 euros. Pero, siendo realistas, no mucha gente puede hacerlo.
Con contratos temporales, sueldos bajos y alquileres por las nubes, son muy pocos los que pueden ahorrar el 20% del valor de una vivienda en un plazo de tiempo más o menos razonable. Por suerte, hay una alternativa.
La hipoteca 100 financiación es una modalidad de financiación en la que el banco te ofrece un préstamo hipotecario por el valor total del precio del inmueble. En algunos casos incluso se ofrece el 100% del valor más el importe necesario para cubrir los costes de adquisición del inmueble.
¿Cómo solicitar y acceder una hipoteca de este tipo?
Lo primero que debes tener en cuenta es que las entidades bancarias, no ofrecen este tipo de préstamos a nivel particular. Ahora bien, sí que podremos acceder a ellos a través de un bróker hipotecario.
En muchos casos el acceso a estos préstamos también puede conseguirse con ayuda de las inmobiliarias, que se encargan de hacer un estudio pormenorizado y personalizado del cliente y le ayudan a encontrar la oferta de financiación más adecuada para él.
Requisitos para acceder a estos préstamos
A la hora de acceder a un préstamo hipotecario de este tipo no van a exigirte requisitos diferentes a otros préstamos. Lo que más le interesa al banco es tu solvencia. Por eso, es normal que quieran ver tu contrato de trabajo y las últimas nóminas entre otra documentación.
No es necesario que cobres una cantidad estratosférica, lo que de verdad quiere comprobar la entidad bancaria es que tienes un puesto de trabajo estable y que con tu nivel de ingresos podrás pagar el préstamo y cubrir tus necesidades básicas.
Por eso también te piden información sobre otros préstamos y créditos que tengas pendientes de pago. El banco es el primer interesado en que no te endeudes demasiado, porque lo que menos quiere es que dejes el préstamo sin pagar.
Otro aspecto que revisa con especial interés el banco es que no constes en un fichero de morosos (ASNEF y similares), porque esto implica que está en duda tu solvencia.
Si estás pensando en comprar una casa pero no puedes permitirte ahorrar todos los meses una parte de tus ingresos, lo mejor es que te decantes por una financiación hipoteca 100. Eso sí, asegúrate de ser una persona solvente. Será necesario que tengas un empleo estable y que no tengas muchas deudas.
Quizá sea buena idea hacer un esfuerzo y cancelar algunos préstamos pendientes antes de hipotecarte. Además, asegúrate de que no estás en un fichero de morosos. Si lo haces así, lo más seguro es que no tengas problemas para acceder a la financiación que necesitas.