La compraventa de viviendas es una operación que se ha ido simplificando con el tiempo. Hoy todos los trámites son mucho más sencillos y rápidos, pero hay cosas que no cambian, como el hecho de que tienes que pagar a Hacienda por la ganancia que obtienes al vender tu casa, así que vamos a ver qué impuestos para vender una vivienda hay que pagar.
El Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana (IIVTNU)
Detrás de este nombre tan largo y complejo se esconde lo que comúnmente llamamos plusvalía, y es uno de los impuestos para vender una vivienda que hay que pagar. Se trata de un impuesto de tipo directo y de titularidad municipal que tenemos que pagar al Ayuntamiento en compensación por el enriquecimiento que hemos experimentado al haber aumentado el valor del terreno en el que está la vivienda.
El tipo de gravamen que se aplica depende de cada Ayuntamiento y varía en función del tiempo que se haya sido propietario del inmueble, pero es importante tener en cuenta que el vendedor dispone de un plazo de 30 días hábiles a contar desde el siguiente a la venta para liquidar el impuesto.
El pago del IBI en la venta de una vivienda
Cuando se analiza qué impuestos para vender una vivienda hay que pagar al vender una casa el pago del IBI suele suscitar dudas si en el momento de llevarse a cabo la transmisión del inmueble todavía no se ha devengado el impuesto.
En este caso lo normal es acordar repartir el importe de forma proporcional al tiempo que cada titular va a ser propietario del inmueble. Por ejemplo, si la casa se vende a finales de septiembre, el vendedor pagará la parte del IBI correspondiente a nueve meses y el comprador la correspondiente a los últimos tres meses del año.
El IRPF en la transmisión de inmuebles
Al vender una vivienda el patrimonio del vendedor se incrementa o se reduce (suele ser más común que se incremente), y esto hay que dejarlo reflejado en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas.
En estos casos se aplica tanto el gravamen estatal como el gravamen autonómico, y los porcentajes van variando en función de la cantidad de dinero obtenida con la venta.
Como excepción, estarán exentas de tributación las cantidades que se reinviertan en una nueva vivienda habitual o gastos derivados de la venta de en la operación. Es decir, que si vendes tu casa pero usas ese dinero para comprar una nueva que sea tu domicilio, te puedes ahorrar una cantidad importante en la declaración de la Renta.
Impuestos que corren a cargo del comprador
Al tratar el tema de qué impuestos hay que pagar al vender una casa no podemos perder de vista el hecho de que también el comprador tiene que asumir el pago de tributos.
En primer lugar tendrá que pagar el IVA (si adquiere una vivienda nueva directamente a una empresa o profesional) o bien el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales si hace la compra a un particular. También tiene que pagar el Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados.
Por eso, tanto el que compra como el que vende deben tener en cuenta la cantidad que van a tener que pagar en concepto de impuestos para valorar si realmente la operación les interesa.